He estado leyendo la homilía del Papa hoy en la celebración
durante la que ordenó a 19 nuevos presbíteros. La he leído varias veces y
confieso que en sus palabras sobre lo que debe ser un buen sacerdote yo he
reconocido a muchos. Casi he ido poniendo rostros a cada frase.
Uno puede sentirse, saberse oveja, por referencia a sí mismo,
por referencia al resto de las ovejas y teniendo como referente a su pastor. He
tenido, tengo la suerte, de tener unos pastores ejemplares.
Cuando he tuiteado la homilía de S.S., alguien elegido por
Cristo de manera particular, que se va formando para ser pastor, ha dicho que “les
pide que sean presbíteros que conozcan las llagas de sus ovejas”; su tuit me ha
recordado que yo, además, sé que cuento con un pastor que conoce las mías, y
mientras lo leía he dado gracias a Dios. A él se las he dado muchas veces por
mucho que me empeñe en repetir que a un hermano no se le dan las gracias.
Un pastor conoce a sus ovejas por su nombre. Esta tarde,
antes de la Eucaristía de 21h en PS, entré en la sacristía a recoger el papel
con los avisos que tenía que leer. Allí estaba Carlos Galán CSsR, que será
ordenado diácono el día uno de mayo por D Carlos Osoro y el P. Damián Mª Montes
hablando con el M.R.P. Michael Brehl, el Superior General de los Redentoristas
que había venido de Roma. Abrazo fraterno mientras me decía “que alegría verte,
Enrique”. Conoce el nombre de sus ovejas, también de las de aquí. El P. Michael
nos ha regalado una homilía de las que elevan el alma, inflaman los corazones y
le hacen a uno salir levitando. Nos ha recordado que “estamos llamados a
custodiarnos los unos a los otros con ternura, amor y fidelidad”, “formamos una
Familia”. Durante la homilía, dos chicas jóvenes no asiduas a PS, admiradas y
sorprendidas por sus palabras y su simpatía me preguntaron quién era el
sacerdote…
Michael nos pidió que rezáramos por él y por quien esté a
nuestro lado. Yo hoy me acuesto pidiendo por nuevas y santas vocaciones. Por
personas receptivas, dispuestas a discernir su vocación, discernir dentro de su
vocación, que sepan perder los miedos y dejarse hacer por el Buen Pastor; por
jóvenes que, siguiendo el carisma de San Alfonso y la alegría de su sucesor
actual, no tengan miedo a mostrar la Buena Noticia con ternura, amor y
fidelidad. Me acuesto pidiendo por ovejas que sean referencia para otras, que
les abran los ojos y muestren el camino para custodiarse mutuamente; por ovejas
cercanas a su pastor; por ovejas que sepan acompañar, alentar a los jóvenes,
custodiar a los ancianos. Por rebaños que eliminen prejuicios, derriben
barreras, entreguen sus dones, sean faros en el mundo. Por rebaños, comunidades
que se sepan Familia. Con pastores CSsR. Qué ¿algún corderillo se anima?
Así es el mío y en el voy scalando en Familia.